“Una pedagogía emancipatoria supone más la disolución de aquello que uno consideraba incuestionable y la posibilidad de apertura hacia lo otro”. Darío Sztajnszrajber.
“La educación es siempre un encuentro con el otro” Darío Sztajnszrajber.
La educabilidad.
Johann Friedrich Herbart, filósofo y pedagogo alemán (1776-1841) fue quien acuñó el término “Educabilidad” y el artículo “Educabilidad, formación y antropología pedagógica: repensar la educabilidad a la luz de la tradición pedagógica alemana”, cuyos autores son Andrés Klaus Runge Peña y Juan Felipe Garcés Gómez, nos señala que la educabilidad es “Una palabra que hace referencia a la capacidad antropológica del hombre de transformarse internamente mediante acciones pedagógicas externas”. (https://www.redalyc.org/pdf/1053/105322389002.pdf)
Y subraya que “El concepto fundamental de la pedagogía es la educabilidad del alumno. El concepto de educabilidad (ductilidad, plasticidad) es de más vasta extensión”. Agregamos que a nuestro criterio es un atributo natural de la especie humana que requiere ser estimulada.
Una vez referido brevemente pero sustanciosamente sobre la educabilidad como objeto de la pedagogía, nos introducimos en el ámbito escolar.
Enfoque cooperativo.
Se alude con mucha frecuencia en desarrollar una educación de calidad e inclusiva, y esto está muy bien, sin embargo, las circunstancias actuales de profunda crisis civilizatoria reclama una pedagogía con contenidos educativos emancipatorios que no están presentes hoy.
Nuestra atención y reflexiones críticas plantean construir un nuevo paradigma educativo basado en la teoría y práctica de la pedagogía y economía cooperativa porque provee de herramientas conceptuales y procedimentales empresariales de carácter social dirigidas al Buen vivir.
La tecnocracia educativa.
La profusa literatura y tratados diversos, así como publicaciones periodísticas, dan cuenta de diversas razones sobre el origen de la crisis educativa, algunas compartimos, otras no, de manera tajante porque en sus argumentos no van al fondo de la cuestión cual es la desigualdad social creciente acompañada de la agresión contra-cultural que ha desatado el neoliberalismo y el neofascismo a nivel global.
Los tecnócratas de organismos internacionales con sus recetas han invadido con sus terminologías economicistas a la educación, desvirtuándola de su esencia social, profundamente humana.
La escuela.
La escuela es una institución que en los últimos tiempos viene siendo severamente cuestionada en el mundo entero, luego ese cuestionamiento se instala contra los maestros/as.
Sin embargo, la escuela ha sido, es y seguramente por mucho tiempo más seguirá siendo el mejor lugar del proceso enseñanza-aprendizaje por mucho.
La escuela no es una empresa mercantil con sus términos técnicos económico que “produce” niños/as educadas, que “gestiona y administra la institución”, etc., y sobre todo abruman y fastidian a los maestros/as con papeleo, estadísticas y todo tipo de formularios y de planificaciones anuales y áulicas que a la postre restan horas a su descanso, vida familiar, estudio y perfeccionamiento profesional.
Todo pareciera indicar que con esas abrumadoras cantidades de papeleos y reuniones docentes interminables están destinadas a bloquear la conciencia del educador sobre sus prácticas educativas y su propia vida dentro y fuera de la escuela.
Los y las maestras no son consultadas en la elaboración y aplicación de ciertos criterios técnico-pedagógicos en los currículos y las diversas planificaciones y proyectos, todo es de inexcusable cumplimiento, pese a sus enormes experiencias. No existen reuniones que traten estos importantes asuntos.
En verdad, tales papeleos y excesivas tareas de las métricas y las mediciones de asistencia e inasistencias de los educandos, disminuyen sus energías de enseñanza, ese es y no otro el resultado de tantas exigencias burocráticas que luego las auditorías y evaluaciones a gran escala y los datos cuantitativos demuestran una y mil veces el resultado que no puede ser otro que la disminución de la calidad educativa y del bajo nivel de vida del docente con salarios indignos.
Rodea a las escuelas-en especial a las ubicadas en barrios marginales y rurales-padres y madres también marginales por la política pública neoliberal y que están llenas de necesidades insatisfechas que impactan negativamente en la familia, pues dificultan enormemente la debida atención a sus hijos, en especial en el tema preponderante que nos ocupa a los/as docentes: La educación.
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