El Consejo Superior de la UNA, aprobó por unanimidad la primera carrera interinstitucional que desarrolla la UNA. Esta Licenciatura, creada en conjunto con la Universidad Nacional de Jujuy, tiene el objetivo de articular las tradiciones gastronómicas y agroindustriales regionales de todo el país y potenciar la soberanía alimentaria, la diversidad cultural y la generación de valor desde una perspectiva soberana basada en el desarrollo sustentable y el cuidado de los recursos naturales.
La rectora de la UNA, Sandra Torlucci, se refirió a la importancia estratégica del trabajo conjunto con la Universidad de Jujuy, ya que demuestra el carácter profundamente federal del sistema universitario argentino. Además, destacó la cantidad de poblaciones migrantes que coexisten en los barrios de la ciudad de Buenos Aires, y celebró el hecho de que la Universidad Nacional de las Artes pueda seguir contribuyendo y formando parte de la integración social y regional.
Por su parte, Yamila Volnovich, secretaria de Asuntos Académicos de la UNA, destacó la vinculación con la facultad de Ciencias Agrarias: “Esta propuesta demostrará la potencia del trabajo conjunto e interdisciplinario entre ciencia y arte así como su capacidad para incidir en el mundo del trabajo, el desarrollo industrial y la generación de valor, desde una perspectiva sustentable”.
Además destacó que la creación de esta carrera permite “incorporar a la educación superior propuestas que han sido históricamente marginadas de las instituciones académicas: la cocina, el estudio de la alimentación, la cultura alimentaria desde una perspectiva artística, antropológica, sociológica, científica, no eran reconocidas en el ámbito universitario”. Además permite visibilizar y legitimar los saberes y prácticas vinculados a las comunidades originarias, migrantes y minorías y, sobre todo, reconocer el trabajo invisible de las mujeres.
La Ingeniera Magda Choque Vilca, asesora de la carrera por la Universidad Nacional de Jujuy, expresó su profunda emoción y alegría y señaló: “cuando unx dice arte culinario, está diciendo muchas más cosas que la cocina. Está refiriéndose a la creatividad, a lo afectivo, a lo emocional”. “Comer es un acto político” -prosiguió- “esto significa que estamos hablando de nuestras economías regionales, de nuestros desarrollos locales, de nuestras posibilidades y potencialidades desde cada lugar, pero por sobre todas las cosas, estamos hablando de nuestro derecho a decidir qué ponemos en el plato; y ponemos muchas más cosas que un ingrediente, ponemos la cercanía de quien nos vende, ponemos el trabajo cuentapropista, ponemos la movilización de mujeres que necesitan una actividad para sostener a las familias”.
Para quienes se gradúen con el título de grado de Licenciado/a/e en Cocina Regional y Cultura alimentaria podrán además de desempeñarse como cocinerxs profesionales en restaurantes, eventos, cocinas comunitarias, cocinas rurales, dirigir equipos interdisciplinarios para la implementación de programas de desarrollo alimentario; diseñar y dirigir servicios gastronómicos estatales, comunitarios y privados; elaborar y asesorar en la formulación de políticas de desarrollo alimentario; desarrollar, dirigir y/o evaluar emprendimientos gastronómicos; así como asumir la dirección de grupos de investigación científica y/o tecnológica en el campo de la Cultura Alimentaria y la Gastronomía. Otorga también el título intermedio de Tecnico/a/e en cocina regional y cultura alimentaria, que busca la articulación entre la formación universitaria y el mundo del trabajo facilitando la inserción laboral de quienes egresen, así como el reconocimiento de saberes previos y prácticas profesionales.
Resolución CS N° 16/2023
Sé el primero en comentar