Daniela Reich «la Educación es el motor del Desarrollo y depende fundamentalmente de quienes enseñan»

1. Daniela como docente lo consulta ¿Por qué hay una sensación que el docente ha perdido consideración social?
Creo que la pandemia ha ayudado a revertir esa pérdida de consideración social a la que hacés referencia. Cuando el gobierno decidió de un día para otro cerrar las escuelas, quienes salieron creativamente, con esfuerzo y con mucho compromiso a hacer escuela a la distancia fueron los equipos docentes.
El ministerio de Educación tardó mucho en reaccionar, al punto que recién estableció los contenidos prioritarios muy avanzado el año. En el mientras tanto, cada escuela, con sus directores a la cabeza y los equipos docentes, sostuvieron el vínculo con las familias y los aprendizajes. Muchas veces lo hicieron sin respectar los horarios porque los chicos tenían disponible los celulares recién cuando volvían sus papás de trabajar. Entonces, creo que después de todo lo vivido, las familias y la sociedad volvió a valorar la escuela y a los docentes; y debemos continuar en ese camino. La Educación es el motor del Desarrollo y depende fundamentalmente de quienes enseñan.

2. ¿Cómo se puede recuperar la responsabilidad principal del Estado como garante de una educación pública de calidad para todos? ¿Qué papel les toca a los legisladores?
El primer paso es reconocer los errores y para esto es clave la evidencia del estado de situación actual de la educación en la PBA. En noviembre del 2021 las autoridades educativas de la provincia difundieron a algunos medios que casi 12 mil chicos y chicas no habían vuelto a la escuela luego de la pandemia, hoy se sabe que en el sistema hay 5.160.000 de estudiantes, cifra en la que se desconoce si está compuesta por aquellos que ya no están en la escuela.
Nuestro papel como legisladores es clave para defender el derecho a la educación a través de pedidos de informe al poder ejecutivo y la generación de proyectos que otorguen más garantías para que se garantice este derecho. Hemos sido elegidos por el pueblo para representar los valores de nuestro bloque, en el cual la educación es clave y donde no da lo mismo que los chicos y las chicas aprendan o no. Todos tienen que estar en la escuela, aprendiendo.

3. ¿Cómo generar una educación inclusiva y que genere aprendizajes de calidad para todos los estudiantes?
Es clave el reconocimiento de cada niño, niña y adolescente como individuo que aprende y por lo tanto, cada trayectoria escolar debe ser considerada como única. La educación debe ofrecer alternativas para educar en la diversidad. Cuantos más escenarios, experiencias y alternativas de enseñanza se presenten, más rica, cautivante y motivante será la experiencia de aprender. Desde este paradigma entendemos que no todos los métodos de enseñanza pueden ser aplicados para todos y todas.

4. Daniela usted integra la Comisión de Educación de la Provincia de Buenos Aires ¿Qué proyectos se trataron el año pasado? 
Gran parte del trabajo del se focalizó en conocer los impactos de la pandemia en su profundidad; cuántos chicos dejaron la escuela, que está haciendo el gobierno para que vuelvan y qué para que recuperen sus aprendizajes. Hay un vacío de información sobre todo entre los estudiantes de la escuela secundaria, que entendemos que son los que más perdieron conexión con la escuela porque salieron a trabajar, porque vieron afectada su salud mental por el año y medio de encierro, y porque históricamente es la edad donde se da el mayor abandono escolar. Llama la atención que todavía no tengamos información fehaciente de lo que implicó para ellos la pandemia. En eso se basaron los pedidos de informes presentados y que no han sido respondidos formalmente por la Dirección de Educación y Cultura.

5.  Por último, una frase para usted o comentario sobre la educación que le haya impactado últimamente. Acá si tiene algún proyecto educativo lo puede exponer.
En la pandemia nos centramos en abrir las aulas; hoy trabajamos para que los chicos estén en la escuela, aprendiendo. Tenemos que fortalecer cosas tan básicas como la alfabetización y los cálculos y el pensamiento matemático más básico. Pero no podemos olvidar que vivimos en un mundo en constante transformación, atravesado por las innovaciones tecnológicas, que implica formar a los niños y jóvenes en las habilidades del Siglo XXI. Lo veo en mis hijos, su forma de aprender, de vincularse, de proyectarse es completamente diferente a lo que vivimos nosotros. Entonces, tenemos que fortalecer cosas que parecen del siglo XX y al mismo tiempo darles a los chicos las herramientas para que puedan desenvolverse positivamente, y con libertad de poder elegir qué quieren ser, cómo quieren vivir, en el siglo XXI.