La Inteligencia Artificial en la Educación: Del Cyborg Educador al Microscopio Cultural. La integración de la inteligencia artificial (IA) en la educación plantea una profunda reflexión sobre nuestras prácticas pedagógicas y nuestra comprensión del conocimiento. Al explorar preguntas como: ¿Son los humanos quienes crean los objetos artificiales o los objetos artificiales quienes transforman al humano? ¿Es posible pensar la IA como un instrumento similar al microscopio?. Se abre un marco filosófico y antropológico que desafía nuestras concepciones tradicionales y expande las posibilidades del aprendizaje. Este análisis examina cómo la IA transforma la educación, centrando su atención en la figura del cyborg educador; y la idea de la IA como “microscopio cultural”.
Humanos y artefactos: Una relación de co-creación. Desde tiempos remotos, los artefactos creados por la humanidad no solo transforman el entorno, sino también a los propios humanos. Según Sandrone, el ser humano es una entidad flexible que varía históricamente en función de su relación con el mundo artificial. Esta interacción se observa desde las herramientas más rudimentarias hasta los algoritmos de aprendizaje automático, que extienden nuestras capacidades al tiempo que modifican nuestras prácticas culturales y pedagógicas.
El filósofo Bernard Stiegler describe esta relación como una coevolución, donde los artefactos tecnológicos moldean nuestras subjetividades y estilos de vida. En educación, esto se traduce en herramientas como los sistemas de gestión de aprendizaje y algoritmos de personalización, que redefinen tanto el proceso de enseñanza como la comprensión del conocimiento. Sin embargo, como recuerda John Searle, estas máquinas, aunque procesan información, carecen de semántica, es decir, de comprensión genuina. Este debate es esencial en el ámbito educativo, donde el riesgo de reducir el aprendizaje humano a patrones predecibles plantea un desafío para la riqueza del conocimiento.
El cyborg educador: Entre autonomía y dependencia. La figura del cyborg educador representa a docentes que integran herramientas tecnológicas para ampliar sus capacidades pedagógicas. Según Donna Haraway, el cyborg trasciende dicotomías tradicionales como lo natural y lo artificial o lo humano y lo tecnológico, invitando a repensar las relaciones entre ambos mundos.
Este modelo plantea preguntas éticas y pedagógicas sobre el equilibrio entre la autonomía del educador y su dependencia de la tecnología. Mientras las herramientas tecnológicas pueden enriquecer la práctica educativa, Luciano Floridi advierte que los algoritmos procesan datos sin comprenderlos, lo que podría derivar en una educación menos crítica y más estandarizada.
El docente contemporáneo debe adoptar un rol activo como mediador crítico, capaz de interpretar y contextualizar las decisiones algorítmicas. Más allá de ser usuarios pasivos, los educadores deben garantizar que la tecnología responda a propósitos éticos y humanos, evitando que se convierta en un mero instrumento de control.
La IA como microscopio cultural
La analogía entre la IA y el microscopio resalta su capacidad de revelar lo invisible, no en el mundo natural, sino en los datos sociales y educativos. Así como el microscopio transformó la observación científica, la IA organiza y analiza grandes volúmenes de datos, revelando patrones y dinámicas que antes pasaban desapercibidos.
En el ámbito pedagógico, esto subraya la necesidad de una alfabetización digital crítica. Si bien la IA puede personalizar el aprendizaje, también conlleva riesgos de sesgos y vigilancia. Los datos que alimentan los algoritmos reflejan estructuras de poder y prejuicios sociales, por lo que es fundamental utilizar esta tecnología de forma consciente, asegurando que amplíe las posibilidades educativas sin perpetuar desigualdades.
Hacia una pedagogía crítica en la era de la IA
La comparación entre la IA y el microscopio invita a reconsiderar la relación entre tecnología, pedagogía y cultura. Mientras el microscopio expandió los límites de la ciencia, la IA organiza y da sentido a grandes cantidades de información, transformando la enseñanza y el aprendizaje. Sin embargo, estas capacidades no están exentas de desafíos.
La figura del cyborg educador refuerza la idea de que la tecnología debe complementar, no reemplazar, las interacciones humanas. Al integrar la IA en las aulas, es esencial construir una pedagogía crítica que priorice la ética y la creatividad, garantizando que el acto educativo siga siendo profundamente humano.
En última instancia, el éxito de la integración tecnológica en la educación dependerá de su capacidad para equilibrar lo técnico y lo humano, promoviendo una educación que no solo forme individuos competentes, sino también ciudadanos críticos y emancipados.
Bibliografía-Webgrafía de Referencia:
Sandrone, D. y equipos de producción del ISEP. Cyborg educador: mitos, problemas y ensamblajes posibles entre la IA y la educación. Seminario Tecnología y cultura: lo nuevo y lo viejo de la inteligencia artificial. Ciclo de Seminarios “Entre la Pedagogía y la Cultura”. Para el Instituto Superior de Estudios Pedagógicos, Ministerio de Educación de Córdoba.
Blanco, J. y Sandrone, D. (2024). Pensando en el Homo tecnologicus [Vídeo]. Instituto Superior de Estudios Pedagógicos. Recuperado de: https: //www .youtube .com /watch ?v =CBFBPkb -uCQ
Floridi, L. (2023). La IA como agencia sin inteligencia: sobre ChatGPT, grandes modelos lingüísticos y otros modelos generativos. Letras libres. Recuperado de: https://letraslibres.com.
Haraway, D. (1995). Manifiesto para cyborgs: ciencia, tecnología y feminismo socialista a fines del siglo XX. Madrid: Ediciones Cátedra.
Stiegler, B. (2002). La técnica y el tiempo. Fuenterrabía: Editorial Hiru.
La nota fue realizada por la Profesora Elisa Sofía Landriel:Profesora de Nivel Secundario y Superior en Biología. Especialista docente de Nivel Superior en Enseñanza de las Ciencias Naturales (INFoD). Diplomada en Constructivismo y Educación y (FLACSO). Diplomada EN Neurociencias y Emociones en el Aprendizaje (UNVM). Actualización en Pedagogía y Cultura Académica (ISEP). Además, ha trabajado en investigación educativa, colaborando en proyectos como: Laboratorio de Investigación para la Educación Secundaria del Siglo XXI (UCC). Desarrollo de Secuencias Didácticas Innovadoras (UCC).
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