EVALUACIONES A GRADUADOS UNIVERSITARIOS, UNA HERRAMIENTA QUE EN ARGENTINA NO SE APLICA Y BRASIL LO HACE DESDE HACE MÁS DE 20 AÑOS
Por Francisco Boero, subdirector del Centro de Estudios de la Educación Argentina (CEA) En nuestro país resulta difícil conocer el nivel de conocimiento de los graduados universitarios, ya sea de universidades estatales como privadas, debido a la inexistencia de mecanismos para obtener esta información. Esto no ocurre en todos los países latinoamericanos, ya que existen naciones en las cuales se realizan diferentes sistemas de evaluación al finalizar la carrera universitaria. Estos sistemas tienen sus propios mecanismos y características, algunos son de carácter obligatorio y otros optativos. En el presente artículo presentamos el sistema que se aplica en Brasil, el cual se denomina Exame Nacional de Desempenho dos Estudantes (ENADE).
HISTORIA DE LAS EVALUACIONES A GRADUADOS UNIVERSITARIOS EN BRASIL
En Brasil los comienzos de la evaluación del nivel de conocimientos de los graduados universitarios datan a partir del año 1993 a través del Programa de Avaliação Institucional das Universidades Brasileiras (Paiub), este programa inició con la adhesión voluntaria y la autoevaluación y luego se extendió a toda la institución y se completó con la evaluación externa.
Posteriormente en el año 1996 se implementó el Exame Nacional de Cursos (ENC) también conocido como Provão, en su primera edición se evaluaron a 55 mil estudiantes de las carreras de administración, ingeniería civil y derecho. Estos avances fueron acompañados con la creación de instituciones y legislación acordes a las necesidades de los programas de evaluación. En el año 2003 se creó la Comissão Especial de Avaliação da Educação Superior la cual propuso una nueva metodología para medir el aprendizaje de los graduados, que se denominó Sistema Nacional de Avaliação da Educação Superior (Sinaes). El Sinaes fue desarrollado e implementado por el Instituto Nacional de Estudios y Pesquisas Educativas (INEP), y cuenta con tres componentes principales: evaluación de instituciones, evaluación de cursos y evaluación del desempeño de los estudiantes (ENADE). Desde el año 2017 el ENADE comenzó a aplicarse de manera censal aceptando la participación de todos los estudiantes egresados y registrados
en el sistema, alcanzando según las últimas cifras oficiales del año 2021 un total de 500 mil participantes sobre un total de 1,3 millones de graduados en ese año, es decir que se evalúa a más de un tercio del total de graduados, recordando que no se evalúan todas las áreas de estudio el mismo año sino que las carreras cuyos estudiantes serán evaluados se agrupan en “áreas”, y la frecuencia máxima para la evaluación de cada área es cada tres años, por lo tanto, en aquellas áreas cuyos graduados fueron evaluados no serán evaluadas nuevamente por los siguientes dos años.
EL EXÁMEN ENADE
El ENADE evalúa a las carreras e instituciones de educación superior con base en el desempeño de los estudiantes y sus percepciones sobre el proceso de formación de pregrado. De acuerdo con lo dispuesto en el art. 5º, § 5º, de la Ley N° 10.861/2004, constituye un componente curricular obligatorio, registrándose en el historial académico del estudiante solamente la situación regular respecto a esta obligación. Es decir, deberán participar en la prueba todos los estudiantes egresados calificados, identificados según el control académico que realiza la Institución de Educación Superior (IES), y registrados por la respectiva Institución de Educación Superior. El hecho de que esta evaluación constituye un componente curricular obligatorio, implica que aquellos estudiantes habilitados a rendir el examen que no se presenten no podrán recibir su diploma.
Además de evaluar el desempeño de los estudiantes en relación al contenido programático previsto para el respectivo curso, y su capacidad de adaptación a las demandas derivadas de la evolución del conocimiento y de su capacidad de comprensión de temas fuera del ámbito específico de su profesión, el examen ayuda a la producción de información subsidiaria para acciones de mejora de la calidad en la educación superior, en el ámbito del Sistema Nacional de Evaluación de la Educación Superior (Sinaes) y el cálculo de Indicadores de Calidad de la Educación Superior.
Las pruebas se componen de una parte de Formación General, común a las enseñanzas de todas las áreas, y una parte de Componente Específico, propia de cada área de evaluación. Para la edición correspondiente al año 2025, la sección de Formación General tendrá 10 preguntas de las cuales dos serán discursivas y ocho de opción múltiple mientras que la sección del Componente Específico de cada área de evaluación contará con 30 preguntas de las cuales tres serán discursivas y 27 de opción múltiple, que involucran situaciones, resolución de problemas y estudios de casos. Por ejemplo, en la última evaluación correspondiente a la carrera de Agronomía del año 2023, las preguntas de formación general (comunes a todas las carreras) examinaron temas como: desigualdad social; medio ambiente; seguridad alimentaria y desigualdad; saneamiento; cobertura de vacunación infantil; inteligencia artificial; movilidad urbana; género, identidad cultural y racismo; trabajo y envejecimiento; encarcelamiento femenino; salud mental. Por su parte, en el componente específico agronómico algunos de los temas indagados fueron: el fenómeno La Niña y la agricultura; el sistema agrosilvopastoril; la corrección de la acidez del suelo; el uso de agroquímicos y salud pública; la regulación de pulverizadores agrícolas; el manejo de plantas transgénicas; plagas en los cultivos; la sostenibilidad y la innovación en el sector agropecuario. En cuanto a la incidencia sobre el puntaje final de cada una de las partes del examen, le corresponde un 25 por ciento a la evaluación de Formación General y un 75 por ciento al Componente Específico.
Además de la evaluación de conocimientos, todos los participantes deben completar el Cuestionario de Estudiantes, el cual tiene como objetivo recabar información que permita caracterizar el perfil de los estudiantes y el contexto de sus procesos educativos, relevante para comprender los resultados y apoyar los procesos de evaluación de carreras de pregrado e instituciones de educación superior.
Una vez que el estudiante se encuentra debidamente registrado en el sistema obtendrá una Tarjeta de confirmación de inscripción la cual contiene el número de registro, la fecha, hora y lugar de las pruebas, y la atención especial a recibir en caso de haber sido solicitada. El día del examen los estudiantes deben presentarse con su documento de identidad al lugar indicado, las puertas del edificio se abren 1 hora y media antes del comienzo del examen y luego de una hora se cierran quedando inhabilitado el acceso hasta finalizar el tiempo completo de examen que es de alrededor de 6 horas y media.
Por su parte, los resultados de desempeño individual identificados en ENADE se ponen a disposición exclusivamente del egresado que participó en la prueba a través del sistema ingresando con el usuario y contraseña personales. Los resultados de los cursos, instituciones de educación superior y áreas de evaluación se ponen a disposición para consulta pública en el Diario Oficial de la Unión, en el Sistema ENADE, en el Sistema e-MEC y en el portal del Inep, en forma de conceptos, informes, microdatos y sinopsis estadísticas. La información se distribuye a través de estos medios de difusión, según su relevancia. Los informes del ENADE proporcionan evidencias para que los Comités de Autoevaluación de las instituciones de educación superior y los Centros de Enseñanza Estructurantes de los cursos de graduación reflexionen sobre sus proyectos pedagógicos y desarrollen acciones, en búsqueda de mejoras.
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