1.Samanta: ¿Es la evaluación un espacio de conflicto en las escuelas? ¿La evaluación es una pieza clave en el aprendizaje o parte del aprendizaje?
La evaluación sucede permanentemente en las escuelas, en el sistema educativo. Es una instancia, un momento más del proceso de enseñanza/aprendizaje.
Existen distintas modalidades de evaluación por supuesto, que difieren en sus carácterísticas, sus propósitos. La evaluación aúlica, que desarrollan los docentes con el objetivo de conocer que es lo que han aprendido sus estudiantes, qué dificultades presentan, tiene como principal propósito apoyarlos en forma individual en su proceso de aprendizaje.
Por otro lado, la evaluación estandarizada, a gran escala, permite conocer en qué medida se alcanzan los contenidos y capacidades que se espera que los estudiantes adquieran en su paso por el sistema educativo, al finalizar un ciclo o nivel. Este tipo de evaluaciones están dirigidas a evaluar a nivel de sistema educativo, no de los estudiantes, es por ello que en general se trata de evaluaciones anónimas. Las evaluaciones estandarizadas, formativas, como Aprender en el caso de Argentina, pretenden generar información que alimente los procesos de toma de decisión de política educativa de cara a la mejora continua.
Todo tipo de evaluación es condición necesaria, aunque no suficiente, para promover procesos de mejora. Se requiere además, que los actores de la comunidad educativa accedan a los resultados y se apropien de los mismos, que los usen como insumos para tomar decisiones tanto a nivel de política educativa, como a nivel de las escuelas.
2.¿Qué políticas educativas se llevan a cabo para que el rendimiento en el aprendizaje, repetición y graduación no lleguen a ser un problema endémico en la concreción del programa educativo en las escuelas rurales en nuestro país en el tema de la evaluación?
Aprender 2016, que fue censal en el nivel primario, es decir que por primera vez abarcó la totalidad de las escuelas, incluyendo las más pequeñas y alejadas, evidenció que, en promedio, las escuelas primarias rurales presentaron mejores resultados en relación al promedio de las escuelas urbanas de gestión estatal. Además, los estudiantes de las escuelas primarias rurales con secciones de grados agrupados (o plurigrado) obtuvieron mejores desempeños, en relación a estudiantes que asisten a escuelas con un formato tradicional. Por el contrario, para el nivel secundario, los resultados de las escuelas rurales son más bajos que los de escuelas urbanas.
Esta información que se deriva de una evaluación estandarizada, nos permite elaborar algunas hipótesis en relación a las escuelas rurales y los niveles de desempeño alcanzados por sus estudiantes, al mismo tiempo que nos plantea ciertos interrogantes. Estos resultados se enmarcan en un conjunto de intervenciones y políticas implementadas en las últimas décadas en el ámbito rural por el Ministerio de Educación Nacional y los ministerios jurisdiccionales. Estas intervenciones parecen haber contribuído a generar mejores condiciones para que estas escuelas pudieran desarrollar sus fortalezas pedagógicas. Asímismo, los resultados evidencian que el formato de plurigrado puede estar contribuyendo a alcanzar mejores desempeños.
Por otro lado, algunos de los interrogantes que esta información plantea y que requieren de una indagación en mayor profundidad son, ¿qué factores pedagógicos que permiten explicar los desempeños destacados de las escuelas plurigrado? ¿qué aspectos pueden explicar las diferencias de desempeño entre el nivel primario y secundario del ámbito rural, en estudiantes de un mismo contexto socio cultural y geográfico?
Este es un claro ejemplo de cómo la evaluación pone la evidencia al servicio del sistema educativo, para entender mejor algunos procesos y, fundamentalmente, para seguir haciéndonos preguntas, de cara a promover procesos de mejora en el ámbito educativo.
Informe sobre los aprendizajes de los estudiantes en escuelas rurales disponible en:
https://www.argentina.gob.ar/sites/default/files/aprender_2016._escuelas_rurales.pdf
3.Para lograr una eficaz evaluación ¿hay que conocer bien a los alumnos?
Las distintas modalidades de evaluación existentes en el sistema educativo tienen diversos propósitos u objetivos, buscan responder distintos interrogantes y la información que de ellas se deriva tiene diversos usos y destinatarios. La evaluación aúlica, al momento de ser diseñada requiere de un conocimiento de los estudiantes, de aquellos contenidos que fueron trabajados con sus docentes, así como debe ser pensada para poder hacer una devolución a cada estudiante evaluado y poder contribuir a su proceso de aprendizaje.
Por su parte, la evaluación estandarizada busca relevar los desempeños alcanzados por todos los estudiantes del país al finalizar el nivel primario o secundario. Si bien para la construcción de la evaluación Aprender participaron docentes en ejercicio de las 24 jurisdicciones del país, que conocen a sus estudiantes, sus realidades y contextos, la misma no pretende responder a las particularidad de cada estudiante sino justamente dar cuenta a nivel de sistema educativo, los aprendizajes que los estudiantes adquieren. Esta información, agregada a nivel nacional o jurisdiccional alimenta los procesos de toma de decisiones de política educativa, evidenciando los logros y desafíos del sistema en materia de aprendizajes.
Ahora bien, teniendo en cuenta las limitaciones que una evaluación estandarizada de opción múltiple pueda tener, a partir de la aplicación de cuestionarios complementarios a estudiantes, docentes y directivos, se busca relevar información del contexto en el cuál se dan los procesos de enseñanza y aprendizaje y de algunos factores que inciden en los mismos. La información que se releva es de suma utilidad, no sólo para contextualizar los resultados alcanzados, sino que tiene un valor perse para el sistema al generar nueva evidencia en torno a algunas dimensiones relevantes (acceso y uso de tecnologías, características de los docentes, entre otras).
Informes temáticos derivados de Aprender disponibles en: https://www.argentina.gob.ar/educacion/aprender2016
Gracias Samanta.
Perfil de Samanta Bonelli
Socióloga. Políticas Públicas. Educación. EX Directora Nacional de Evaluación de la Calidad y Equidad Educativa. Secretaría de Evaluación Educativa. Ministerio de Educación de la Nación.
Aprender en escuelas rurales.Extracto del Informe.
«En Argentina, los estudios que abordan la situación educativa de la población rural son escasos, y aún son menos frecuentes aquellos que, utilizando información cuantitativa, se proponen realizar una caracterización de alcance nacional o regional. Existe muy poca información sobre la situación de la población el contexto rural, y por este motivo en general los estudios se centran en caracterizar los hogares y la oferta educativa, situando la mirada en las carencias y desafíos del entorno rural.
En este marco, los resultados de Aprender 2016 ofrecen una oportunidad privilegiada para alimentar el círculo virtuoso entre análisis de información y decisiones de política educativa en el ámbito rural.»
«Un aporte adicional de este estudio es la identificación de un conjunto de escuelas rurales destacadas en el nivel primario y secundario. Se entiende como tales a escuelas de gestión estatal que atienden a población vulnerable, muestran desempeños particularmente altos en lengua y matemática, y manifiestan niveles de promoción por encima del promedio. Ellas dan indicios fuertes de la posibilidad real de lograr aprendizajes de calidad en contextos desfavorables, garantizando a su vez una progresión en tiempo oportuno de todos los estudiantes.
Este recorrido en torno a la información de Aprender 2016 constituye un insumo clave para abordar el desafío de la educación en contextos rurales dejando de lado los supuestos, preconceptos y prejuicios que aún perviven sobre las escuelas, docentes y estudiantes, punto de partida indispensable para desplegar un debate profundo de política educativa enfocado en las oportunidades de aprendizaje y el derecho a la educación.»
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