1. ¿Por qué y para qué aprender matemáticas?
Esta pregunta guía mi carrera docente, es el motor de mi pasión por su enseñanza. Allá por el S VII a.C. nació la “Mathema”, un vocablo que en su transcripción latina significa “conocimiento”,” comprensión”, que pretendía ofrecer herramientas para entender el contexto de los sabios griegos de entonces. ¿Qué sería hoy, en el 2020, la Mathema? La complejidad del mundo actual requiere de una lectura multidimensional que permita comprender los fenómenos reales o hipotéticos y poder encontrar solución a los grandes problemas que los originan. Estas situaciones se dan en distintos contextos, intra o extra matemáticos. Reconocemos hoy 7 problemas disciplinares todavía sin solución, como la regularidad de los números primos, el avance tecnológico permite hallar más de estos números, pero no su patrón. En lo extra: el cambio climático, las grandes epidemias, la cura de enfermedades, la economía mundial, la pobreza, etc.; en su racionalización hay matemática. Aprender esta ciencia significa desarrollar un pensamiento complejo, deductivo, argumentativo, crítico, para poder “leer” esta complejidad y modelizar los fenómenos a través de la transferencia de teorías matemáticas que ayuden a interpretarlos.
No se adquiere de una vez y para siempre, es un proceso que comienza en el nivel inicial del sistema educativo y se construye con otros.
2. En la vida diaria les puede decir a nuestros alumnos porque las matemáticas son importantes para que se amiguen con esta materia escolar
No solo decirlo, sobretodo darles la oportunidad de experimentarlo “haciendo” matemática. Variadas son las estrategias didácticas que suelo elegir, la enseñanza para mí es como una gran galera para hacer magia, con variados pañuelos de distintos colores, cada color es una estrategia de enseñanza, que pongo en juego al momento de planificar mis clases. Esta elección, sin ser perfecta, ni definitiva, la he logrado a través de mi actualización continua, desde que me recibí allá por 1986.El paradigma de formación docente en esas épocas era el conductismo, disciplinar, se enseñaba a enseñar matemática pura a todos por igual, se priorizaba el cálculo, quienes resolvían los cálculos mental y rápidamente eran considerados los más inteligentes de la clase.No conforme con mi formación como docente salí a buscar lo que no encontraba como estudiante de nivel secundario, comprender que es matemática y para qué sirve. Encontré en la tecnología un recurso muy potente, primero como maestra de computación enseñando a programar con Basic y Logo algunas operaciones matemáticas a través de los diagramas de flujo y luego con la aparición de la Web interactiva y mi formación como especialista en educación y Tic. Además de ampliar mi propio pensamiento de lineal a complejo, transite mi transformación primero, no todos los alumnos aprenden de la misma manera, ni todos piensan igual. Recién ahí comencé a sentirme feliz con lo que les podía transmitir a mis alumnos y construir con ellos.
3. Imaginemos que usted es el consejero educacional de un país, como Argentina en qué hechos y actividades educativas haría hincapié para que la matemática en el nivel inicial sea una oportunidad para aprender lúdicamente.
Todas aquellas actividades que favorezcan la resolución de problemas mediante el juego con intención pedagógica. Se han diseñado en Argentina muchos materiales curriculares y/o editoriales con propósitos lúdicos para iniciar a los niños en el pensamiento matemático. La integración de las Tic, la programación, la robótica educativa, haciendo foco en el pensamiento computacional y no solo en el instrumental son otros ejes potenciales.
Los niños traen sus propios conocimientos al aula y hay que aprovecharlos, los juegos familiares, por ejemplo.
María Irene Corti. Gestión Educativa-Especialista en educación y Tic -Prof.Matemática-Formación Inicial y continua-Asesoramiento integral para buenas prácticas docentes
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