1. La educación es el principal motor del desarrollo social, cultural y económico de toda sociedad, entonces le pregunto ¿Cuáles son los objetivos de las herramientas Tecnológicas para la educación desde un enfoque de derechos y responsabilidades?.
Los objetivos de las herramientas tecnológicas para la educación como desarrollo social, cultural y económico de toda la sociedad tienen que pensarse y accionarse desde la innovación, la perspectiva de derechos y de género.
La revolución de internet y las tecnologías de la información y comunicación se están democratizando cada vez más a nivel mundial y exige concebir a la alfabetización digital como una política de estado que contribuya a la inclusión digital de los chicos y de todos los ciudadanos en su conjunto. Los niños, niñas y adolescentes nacen en un universo de pantallas digitales que impactan en su crecimiento, construcción de su identidad y formas de vivir. Todos necesitamos aprender a convivir en la cultura digital que atraviesa nuestras vidas en las actividades culturales, laborales, sociales y comunicativas. Las herramientas tecnológicas tienen que contribuir a incluir a los sectores sociales postergados e incorporarse a la cotidianeidad para mejorar la calidad de vida de todos.
Los chicos viven conectados, al mismo tiempo, en varias pantallas digitales y utilizan principalmente las redes sociales para comunicarse, sin embargo, no son un grupo homogéneo. No podemos caer en el error de clasificarlos como un grupo que vive las mismas realidades, al contrario, son un grupo heterogéneo según las posibilidades de acceso a internet y los aprendizajes que tuvieron y tienen cada uno de ellos.
Los chicos son sujetos de derechos que también en la cultura digital necesitan garantizar sus derechos. Tienen derecho a la protección digital, es decir, a la protección contra la explotación, los abusos y la violencia que ahí se desarrolla; demandan que sus padres u otros adultos responsables se ocupen de acompañarlos y educarlos en usos positivos y saludables de internet.
También tienen derecho a ejercer su ciudadanía digital, es decir, al acceso a la tecnología, a la información, a utilizar lo digital a su favor, al derecho a la diversión y al juego digital, y al derecho a la libre expresión que les permita participar sobre los temas que les interesen. Necesitan herramientas que les permitan convivir en internet de forma consciente, responsable, productiva, innovadora, recreativa y saludable para poder beneficiarse de su potencialidad y mejorar su calidad de vida. Conocemos chicos que pueden acceder a sus derechos en la era de internet y muchos otros que no tienen esa posibilidad.
2. Las redes sociales son un fenómeno gracias al poder de comunicación que la Internet facilita, sin embargo, el mal uso de ellas puede hacer que se creen adicciones, principalmente en los adolescentes ¿Es siempre positivo utilizar la tecnología? ¿Hay alguna razón para no hacerlo?
Necesitamos reconocer la doble cara de internet. En el uso de las redes sociales, los chicos pueden llegar a realizar buenos usos y aprovechar el potencial de internet o bien realizar usos peligrosos que los perjudique y confunda.
En esta ocasión voy a reflexionar sobre los videojuegos según los usos que llevemos a cabo. Por un lado, jugar los videojuegos es un gran ejemplo de cómo los chicos con usos inseguros y riesgosos pueden generar consecuencias negativas entre las que reconozco las siguientes:
• Reproducción de estereotipos de género: Se suele reproducir modelos del rol de la mujer o del varón, por ejemplo la posición secundaria que siempre ocupa la mujer.
• Brecha de género en tecnología: Las niñas y adolescentes son las que menos acceden a internet y por ende a elegir profesiones vinculadas al desarrollo tecnológico.
• Adicción a los videojuegos: Se juega de forma desmedida llegando a afectar en el desarrollo de las actividades esperadas para el desarrollo de su vida cotidiana como sus responsabilidades educativas o su sociabilidad con sus pares.
• Contacto inapropiado con acosadores sexuales: Es un camino para que los acosadores sexuales se aprovechen de su cercanía a los videojuegos y se ganen su confianza para abusar de los chicos sexualmente de forma digital y también presencial.
• Contenidos inapropiados de violencia y pornográficos: Suelen mostrar imágenes que promueven acciones violentas o pornográficas que confunden a los chicos.
Por otro lado, relacionarse de forma segura y productiva con los videojuegos desde la niñez y adolescencia puede promover impactos que favorezcan el desarrollo de los chicos. Jugar puede generar el aprendizaje de competencias digitales que los prepara para el futuro laboral, por ejemplo en la identificación vocacional con profesiones tecnológicas, los chicos se sienten motivados con profesiones vinculadas a lo digital. Un dato significativo, es que en México (2019) se creó la carrera de Ingeniería en Videojuegos para formar profesionales especializados en el desarrollo de videojuegos que potencien los campos de la Medicina e Ingeniería. Sin dudas, los chicos que han elegido profesiones vinculadas a las tecnologías expresan experiencias significativas que vivieron desde chicos jugando a los videojuegos.
3. Nos puede definir: Sexting: y Grooming.
SEXTING: En el siglo XXI, las relaciones sexuales están atravesadas por las pantallas digitales y los adolescentes al igual que los adultos viven sus relaciones a través de internet. El sexting es una práctica que cada día crece más y consiste en producir y compartir contenidos e imágenes sexuales a través de las redes sociales, se comparte con amigos y parejas.
Los adolescentes viven su sexualidad practicando el sexting de forma natural y riesgosa. Se refiere al envió de contenidos e imágenes de la vida sexual intima con poses provocativas y desnudez. Una forma de exhibicionismo que experimenta el placer sexual por ser observado y por observar a los otros. El sexting es una práctica riesgosa para los chicos, quienes muchas veces, no toman medidas de seguridad para cuidar su privacidad personal y su identidad digital. Desconocen que internet no tiene derecho al olvido, es decir, que perdemos el control de todo lo que publicamos y compartimos, todo puede expandirse velozmente a un público infinito, conocido y desconocido, con todo lo que ello implica.
Según Jorge Flores, Fundador y Director de Pantallas Amigas, el sexting es practicado especialmente por adolescentes y jóvenes. Para las mujeres el sexting significa un fenómeno de empoderamiento que impacta en su autoaceptación personal, es por ello que son las que más lo practican y, al mismo tiempo, son las principales víctimas. Confían que un otro cuidara su privacidad, se presenta como una forma de ganar visibilidad y aceptación de sus pares, les parece divertido, buscan seducir a alguien. Imitan el exhibicionismo y también lo hacen como consecuencia del consumo problemático de sustancias.
GROOMING: El abuso sexual contra los chicos y la violencia contra las mujeres son problemáticas preocupantes en contexto global que a los chicos como a las mujeres les daña su derecho a la intimidad, privacidad e integridad personal, se los trata como objetos y no como personas, se los deshumaniza. Estas problemáticas, con la expansión de internet, navegan y se desarrollan a través de las redes sociales. Surge el delito del grooming basado en acosar sexualmente en internet a los niños, niñas y adolescentes.
Algunos comportamientos aumentan el riesgo del abuso sexual en línea como el hacer uso excesivo de las redes sin supervisión de los adultos, utilizar las redes para comunicarse con desconocidos a quienes le facilitan datos personales de su familia como su dirección, sus miedos, deseos y pensamientos con o sin imágenes en las redes, por ejemplo “Me siento sola y estoy aburrida. Algún amigo para charlar?”. Los chicos nunca son responsables de ser víctimas del acoso, abuso o la explotación sexual, deben ser protegidos.
El grooming, se refiere al abuso sexual en internet, propio de estos tiempos, donde internet tiene una presencia importante en la vida de los chicos. Es un delito en Argentina y en otros países del mundo. Consiste en el acoso sexual en internet que afecta la integridad sexual de los niños, niñas y adolescentes, quienes navegan en internet como huérfanos digitales expuestos a los posibles peligros porque lo hacen solos y sin supervisión ni acompañamiento de adulto.
Los acosadores sexuales son adultos mayores de 18 años de edad, se esconden detrás de una identidad digital falsa de otro niño, niña o adolescente del mismo género o diferente y con una edad similar a sus víctimas. En otros casos, utilizan su actual identidad digital y suelen ser adultos cercanos como un preceptor, vecino, entrenador o familiar.
Se engaña a los chicos para obtener imágenes sexuales, se los manipula y una vez que ellos ceden en enviar las imágenes les exigen más imágenes amenazando con publicar esas imágenes en público, comunicar a sus padres o bien exigir encuentros presenciales. En los casos de grooming, la intención es abusar sexualmente de los chicos.
Licenciada en Psicopedagogía! Coodinadora del Instituto de Protección y Ciudadanía Digital en Jujuy. Defensoría del Pueblo de Jujuy. Columnista de La Revista CHE.
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