En ningún momento se admitió la existencia de un estado de guerra formal. El número de americanos muertos rondaría los 56 000. Además, se arrojó triple cantidad de toneladas de bombas que en la Segunda Guerra Mundial.
La presencia de los americanos en Vietnam se justificó como ayuda a un pueblo libre frente a la beligerancia comunista, pero la realidad sería diferente. La guerra civil de origen colonial que afectaba este país y la determinación del Vietkong de unificar su país políticamente sería la causa por la que EEUU intervendría, viéndose obligado a, gradualmente, asumir el peso militar de la contienda.
El presidente Johnson, en un principio, pretendió limitar la intervención, pero en agosto de 1964 tuvo lugar el incidente del golfo de Tonkín (el supuesto ataque de norvietnamitas al destructor “Maddox”). Este altercado dio carta blanca al presidente para declarar la guerra, así la cámara expresó la siguiente declaración:
“El Congreso aprueba y respalda la determinación del presidente, como comandante en jefe, de tomar todas las medidas necesarias para rechazar cualquier ataque armado contra las fuerzas de los Estados Unidos, y para prevenir cualquier agresión posterior”.
Así, la presencia de fuerzas militares estadounidenses en el sur de Vietnam aumentaron considerablemente. En 1965, los escasos progresos diplomáticos realizados fueron la causa de la autorización de bombardeos en el norte. Estos fueron justificados por la necesidad de prevenir la infiltración de hombres al sur del paralelo 17 y como represalia contra las incursiones ya realizadas.
Estados Unidos empleó altos explosivos, napalm, defoliantes y sustancias tóxicas diversas que causaron grandes daños y víctimas. Los fines de esos bombardeos eran políticos, es decir, forzar la apertura de negociaciones. A pesar del despliegue de fuerzas (550 000 soldados en 1969), no consiguieron quebrantar la resistencia enemiga. Estados Unidos mantuvo una errónea confianza en su armamento terrestre, consideraba que era claramente superior al del enemigo.
La opinión pública y la propaganda acabaría con Johnson. La actitud crítica de una nueva generación de intelectuales, una prensa cada vez más sensibilizada con la guerra y la brutalidad empleada en ella, las movilizaciones de estudiantes.. serían las causas de su caída.
En 1968 tendría lugar la “Ofensiva de Tet”. Sería la primera operación de gran envergadura, protagonizada por la guerrilla del FNL y los soldados del vietminh. Esta ofensiva terminó con grandes bajas y ninguna ventaja territorial. Todos estos horrores fueron transmitidos por los medios y los transformaron en una gran victoria de Vietnam del Norte. Los acontecimientos y los horrores acaecidos precipitaron a Johnson a retirarse de la guerra lo antes posible.
En estas circunstancias aparecerá la figura de Richard Nixon (1913-1994) . Ganaría las elecciones bajo el lema “una paz con honor”. Al comienzo de su mandato se inició la retirada de tropas terrestres. A cambio se destinó ayuda financiera y material de guerra al régimen sudista de Nguyen Van Thieu. Por otro lado, Nixon realizó un uso estratégico y eficiente de los bombardeos, destinándolos a neutralizar la ruta de “Ho Chi Minh” y los refugios y santuarios del Vietkong en Laos y Camboya.
La intervención diplomática de China y la URSS y su acercamiento con EEUU a principio de los años setenta abrirían el preludio para la paz. Al mismo tiempo, estas dos potencias mediaron con Hanoi para que suavizara su postura. Se llegaría a un acuerdo en la negociación secreta entre H. Kissinger y Le Duc Tho en París en 1973. Fruto de este acuerdo, los americanos abandonarían definitivamente Vietnam y se declaró un armisticio. No obstante, se había estipulado la permanencia de la fuerza aeronaval americana en aguas de Indochina, como garantía del acuerdo.
Las hostilidades entre los vietnamitas se reanudaron, previsiblemente. Sin el apoyo americano (El escándalo watergate impidió tutelar el acuerdo eficazmente), Saigón caería en 1975 al poder de las tropas vietminh.
Los gastos militares empleados en esta guerra por EEUU impidió invertir en numerosos programas sociales, y al mismo tiempo, debilitaron la economía.
Bibliografía:
– Paredes. J. (Coord). “Historia Universal Contemporánea II”.
– Willi Paul Adams (Dir). “Los Estados Unidos de América”.
– Allan Nevis; Steele Commanger. H. “Breve Historia de los Estados Unidos”.
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