Es hora de decir gracias, porque dar las gracias en silencio no sirve de nada. Es hora de decir gracias por el acompañamiento en un año complicado, un año en nos vimos atravesados por un virus que nos hizo pensar, estar a los saltos pero acá estamos renovando las esperanzas educativas.
Nuestro paso por este mundo es muy breve y debemos saber que la vida es una maravillosa oportunidad para aprender a aprender, ser agradecido es un síntoma de buena educación.
Está terminando el año y por lo tanto queremos dar las gracias a: los amigos que me hacen la vida más linda, a los amigos virtuales que nos demuestran día a día que estamos conectados y comunicados a la distancia. A los lectores de nuestra revista que cada día está en permanente crecimiento.
A nuestros alumnos y ex alumnos. A nuestros compañeros de trabajo, a ellos que aunque no coincidimos queremos un mundo mejor, estamos enseñando el futuro y queremos ser partícipes de esto.
A mis amigos que la están pasando mal acá estoy sé que en algunos de ellos la vida les ha dado un golpazo, pero… hay que seguir luchando por lo que quieren ser mañana. Cuando la vida nos golpea es cuando crecemos y cuando nos va bien reímos.
El 2021 está llegando para que todos seamos protagonistas y no espectadores, llega con desafíos y esperanzas.
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